viernes, 12 de junio de 2015

DIETA MEDITERRÁNEA

Cuando mencionamos la Dieta Mediterránea rememoramos la cocina de las abuelas, de sabores intensos, lenta y cuidada preparación. Por desgracia, aunque se la nombra a menudo, es una dieta mal conocida y está siendo abandonada, sacrificada por la comodidad y las prisas. Y es que la dieta mediterránea es un estilo de vida, no sólo un patrón de alimentación, que incluye alimentos locales, propios de la zona mediterránea, tradiciones y costumbres. Tengamos en cuenta que la palabra dieta deriva del griego “diaita”, que significa precisamente eso, estilo de vida.

En el Decálogo de la Dieta Mediterránea, difundido por la Fundación Dieta Mediterránea, encontramos la clave para una dieta sana y equilibrada:

DECÁLOGO DE LA DIETA MEDITERRÁNEA
1- Utilizar el aceite de oliva como principal grasa para cocinar.
2- Consumir alimentos de origen vegetal en abundancia: frutas, verduras, legumbres y frutos secos.
3- El pan y los alimentos procedentes de cereales (pasta, arroz), y especialmente los derivados integrales, deben formar parte de la alimentación diaria.
4- Los alimentos frescos y de temporada, poco procesados, son los más adecuados.
5- Consumir diariamente productos lácteos, principalmente yogur y quesos.
6- La carne roja se tendría que consumir con moderación, mejor como parte de guisos y otras recetas. Las carnes procesadas (embutidos y conservas), en cantidades pequeñas y como ingredientes de bocadillos o platos.
7- Consumir pescado en abundancia, y huevos con moderación.
8- La fruta fresca tiene que ser el postre habitual, mientras que los dulces y los pasteles deben consumirse ocasionalmente.
9- El agua es la bebida por excelencia. El vino ha de tomarse con moderación y durante las comidas, (como máximo 2 copas al día).
10- Realizar actividad física todos los días es tan importante como alimentarse adecuadamente.
Más adelante iremos detallando cada uno de los puntos clave de este sanísimo estilo de vida.